La
opinión y Crítica del camping Montblanc park corresponde a la vivencia de la semana
santa 2014. Fuimos un grupo de 4 caravanas y 1 bungalow. Mi opinión es la que
prevalece, aunque también cuento con la crítica de mis compañeros, todo lo que
escriba en esta opinión seguramente hay alguna pincelada de lo que he podido
escuchar en nuestras conversaciones.
Por ello siempre se agradece un gupo de salidas tan fantástico
;-)
Por ello siempre se agradece un gupo de salidas tan fantástico
;-)
El
Camping Montblanc park está a los alrededores, precisamente, de Montblanc, un
pueblecito medieval del que ya os he hablado en mi anterior articulo. El Camping cuenta
con un parque de bungalows enorme y, proporcionalmente, una zona de acampada
muy pequeña donde se mezclan los campistas de temporada y los itinerantes.
Empezando
por la parte que más nos gustó fueron las instalaciones comunes. Castillos
infantiles grandes y muy bien construidos, junto a unas piscinas y toboganes
dignos de un aquapark hacen que tus hijos no quieran verte en todo el dia. No
llegué a recorrer todo el camping pero en el camino entre la parcela y el castillo
infantil me encontré una tirolina (para que os hagáis una idea). El servicio de
bar y supermercado los encuentro un tanto retirados de la vida del camping y
solo cubre las necesidades mas básicas, pero no tiene mucha importancia ya que
a escasos 5’ de coche nos encontramos un Mercadona.
La
animación es suficiente, aunque a mi hijo no le entusiasmo mucho ya que están
muy orientados a los gustos franceses, eso es una cuestión de simple
adaptación.
En el
grupo hubo quien escogió un bungalow como elemento de acampada. La relación
calidad precio la encontré fantástica ya que por menos de 100€ al dia en
temporada baja ofrezcan una casa de madera con 2 habitaciones, aire
acondicionado-bomba calor y nevera grande mas lavavajillas lo encontré
fantástico. Eso si sabanas, toallas y jabón para lavavajillas no esta incluido!
Lo que
vi en otros bungalows, no fue el caso del que le tocó a nuestro amigo, es que
el entorno lo vi descuidado, había un puñado de bungalows que tenían toda la
vegetación sin arreglar con lo que obligaban a los campistas a saltar matas de
30cm aprox para acceder a sus estancias. Algo parecido nos pasó con nuestras
parcelas que tuvimos que dar aviso para que nos allanaran ya que estaban
impracticables por los surcos de las lluvias del invierno.
Las
parcelas no nos gustaron ya que el terreno estaba compuesto de una arenilla
fina que nos ensuciaba el suelo y las caravanas. Estas parcelas carecían de
sombra aunque en plena semana santa no es imprescindible. El tema de la sombra
es algo irregular en todo el camping ya que hay zonas en pleno bosque y otras
en llanura sin el refugio de los árboles.
En el
apartado de los aseos comunes lo veo de lo mejor del camping. Nosotros lo
encontramos limpios y cada cabina estaba compuesta por ducha, baño y pica lavamanos,
ideal para nuestros gustos y poder asearte a gusto solo o con tus hijos. Eso si
en nuestro bloque de aseos le falló un poco el agua caliente.
Algo
que hay que destacar es que el camping está construido sobre la ladera de una
montaña con lo que hay muchos desniveles. Difícil de caminar pero si te animas
a subir podrás disfrutar de unas buenas vistas.
Hay
algo que ya no me empieza a asombrar y que resulta demasiado común, el camping
está gestionado por un capital francés por lo que el cliente predominante es
francés, los trabajadores son franceses y el camping tiene usos y costumbres de
Francia. Puntualizo, esto no es malo pero tampoco nos suma como campistas
itinerantes.
Lo
mejor: Las instalaciones comunes (piscina y
zona de juego infantil) y duchas
Lo
peor: estado de mantenimiento, da la impresión que actúan según se lo van
pidiendo los clientes
No es
un camping que recomendaría para pasar unas largas vacaciones, pero si quieres
visitar la zona tampoco es desastroso cumple con los mínimos indispensables.
;-)
;-)
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