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| Vistas de Lyon |
El
camping Indigo Internacional se encuentra en Lyon en la parte cental de Francia.
Nuestro motivo para parar en el camping Indigo Fué porque se encontraba justo en
nuestra ruta y Lyon es un lugar curioso que bien merece una visita.
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| Parcela Camping Indigo Lyon |
A la
llegada al camping me causó una grata sorpresa ver como se toman en serio el
nombre del camping, es un camping internacional en toda regla donde podemos
encontrar recepcionistas que hablan muchos idiomas, entre ellos el castellano.
Así que si eres uno de aquellos que no domina los idiomas y quiere pasar un par
de noches en un lugar de Francia este puede ser una buena opción.
Como
camping no es lo mejor que he visto pero cumple
con creces con su cometido, en un lugar idóneo para parar si estas de ruta, justo al lado de la autopista. Tiene unas instalaciones perfectas para asearte y estirar las piernas. Por poner un ejemplo nosotros pudimos disfrutar de una piscina (pequeña) y un pequeño inflable para los más pequeños.
con creces con su cometido, en un lugar idóneo para parar si estas de ruta, justo al lado de la autopista. Tiene unas instalaciones perfectas para asearte y estirar las piernas. Por poner un ejemplo nosotros pudimos disfrutar de una piscina (pequeña) y un pequeño inflable para los más pequeños.
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| Interior de la Basílica de Fourvière |
También
su situación lo hace perfecto para hacer una visita a la ciudad de Lyon, pero
en su contra es que la autopista que traviesa esta ciudad es muy transitada y
si pasas en hora punta te garantizas un atasco seguro.
Lyon es
la tercera ciudad más grande de Francia. Su encanto reside en la parte antigua
donde empieza a los pies del rio Rhone y
acaba en lo alto de la basílica Notre Dame de Fourvière. Desde el camping
tienes muy buenas indicaciones para ir en transporte público, aunque finalmente
optamos por ir en coche, el centro hay infinidades de parkings, a mí me salió
10,50€ algo más de 4 horas de estacionamiento. Aunque en la subida a la
Basílica pude ver algún sitio en la calle libre de zona azul.
Lo más
interesante es pasearse por el casco antiguo e ir subiendo hasta la basílica.
Hay un funicular hasta arriba del santuario, aunque el paseo por los jardines de
la colina de Fourvière no tiene precio (si yo pude tú también!).
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| Subida a la Basílica |
Una
curiosidad digna de ver son los Traboules, un paso de calle a calle que transcurre
entre edificios. Recomiendo que los veais, pero en silencio ya que son habitados
por personas del lugar aunque lo tienen abierto al turista de a pie.
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| Entrada a un Traboule |
Un
consejo, si quieres comer en un restaurante, Lyon se considera la capital gastronómica
francesa, encontrarás muchos restaurantes en la zona antigua pero todos ofrecen
una oferta gastronómica similar que no entra en lo malo o vulgar pero tampoco
buscan la excelencia es una mezcla de comida internacional. Si buscas precio y
calidad te toca cruzar el Rhone. Si buscas algo especial o platos de gastronómicos
típicos de Lyon te toca buscar un buen restaurante y rascarte el bolsillo.
Resumiendo, Lyon es un pozo de sorpresas. Una ciudad bohemia que, por lo poco que pude ver, puedes encontrarte una sorpresa como esta:
La
china de la jornada fue la lluvia, una vez más. No nos dejó ver la ciudad como
dios manda. Quisimos pasar el día e ir a comer a una terraza ya que pintaba que
iba hacer sol. Nos sentamos en una terraza y a media comida nos cayó un
aguacero. No hay nada mejor que un buen chaparrón para acabar compartiendo mesa
en un local con un desconocido porque no entrabamos todos en el comedor
interior. Unas Risas para continuar con la visita al casco antiguo. Una vez en
el camping vimos que la nevera eléctrica auxiliar que solemos llevar en el
coche se había quedado fuera de resguardo y se había muerto (las neveras del
Lidl ya no son lo que eran y no aguantan la lluvia). Nada más empezar el viaje
nos quedamos sin la nevera auxiliar, un buen complemento que nos facilita el
viaje… Pero no queda ahí, consultando la previsión meteorológica vemos que va
empeorando el pronóstico, así que vemos peligrar nuestros primeros días de
Selva Negra. Cambiamos de planes y decidimos ir solo a Friburgo e iremos a ver
la familia pero más tiempo de lo que pensábamos, la lluvia no nos dejará hacer
de turista así que disfrutar de la familia nos apetece mucho más que luchar contra
la meteorología.
;-)
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